Con el deseo de contar con un lugar que sirviese de punto de encuentro y convivencia se construyó a principios de los años 90 la Casa de Hermandad, muy cerca de nuestro templo, además de ser la sede administrativa de la Corporación.

placa

COMIENZOS

Desde comienzos de los años ochenta la Hermandad toma plena posesión del mantenimiento de la Iglesia de Santiago, nuestra sede canónica, lo que posibilitará disponer de unas dependencias en las que guardar los enseres y ser lugar de encuentro para reuniones y actividades. Unas dependencias inauguradas en el año mil novecientos ochenta y cuatro con el descubrimiento de una placa dedicada al maestro Juan, insigne cofrade de nuestra corporación, pero a todas luces pequeña, ante el crecimiento del número de hermanos y actividades generadas en la Hermandad.

El veintiuno de noviembre de mil novecientos ochenta y nueve, constituye el punto de partida de este “sueño” largamente perseguido por nuestra Corporación como era la construcción de su Casa de Hermandad, que se vio materializado tres años después a fecha trece de diciembre de mil novecientos noventa y dos.

Según se recoge en el contrato de cesión firmado por ambas partes: “La Hermandad de la Santa Caridad, dueña en pleno dominio del inmueble urbano donde estuvo instalado el Colegio Salesianos de Carmona, cede a nuestra Hermandad el uso del solar de doscientos cincuenta metros cuadrados inmediato a lo que fue la puerta de entrada del referido Colegio Salesianos, a la capilla de María de Auxiliadora y bar de antiguos alumnos, que linda por la derecha de su entrada con la calle Paso de la Duquesa, por su izquierda con el Hogar-Residencia de Ancianos de la Santa Caridad y por el fondo con resto de la finca de que procede, hoy huerto-jardín de dicho Hogar… Esta cesión se hace por el tiempo que exista la Hermandad de la Columna de Carmona…”

La firma de este contrato de cesión coincide casi en el tiempo con un relevo en el cargo de Hermano Mayor y de Junta de Gobierno constituida a fecha cuatro de marzo de mil novecientos noventa.

La descripción del edificio previa a la remodelación, contenida en la memoria del expediente de legalización de las obras era: “Edificio de dos plantas con acceso por la calle Paso de la Duquesa mediante un portalón a zaguán formado por una bóveda a cuatro aguas, que se apoyan en muros de cargas y cubierta de tejas árabes.

Desde el zaguán se pasa a un patio, el hueco de entrada de zaguán a patio es un arco que tiene forma de medio punto y a su vez en su recorrido tres arcos. Del patio entrando a mano izquierda había una puerta por la que se entraba a un bar con ventana a patio, de éste y según se entra al fondo había unos tres escalones por los que se accedía a un corredor, de éste a mano izquierda una puerta que daba al despacho del Director del colegio. A mano derecha había una pequeña capilla. La planta alta del edificio se componía de tres salones que se utilizaban como recreo para los asociados a los centros juveniles, San Juan Bosco y Santo Domingo Savio. Su estructura era muros de carga de 60 cm de espesor, forjado tradicional de las casas antiguas de Carmona de viguetas de rollizos de madera y entrevigado con tableado de madera sobre el que apoyaban solería de ladrillo, cubierta de tejas árabes.
Los forjados y cubierta se encontraban en mal estado de conservación con vigas flechadas y cabezas podridas debido a la entrada de agua.”

REMODELACIÓN

Recogiendo el testigo del duro trabajo de la anterior Junta de Gobierno, la Junta presidida por nuestro hermano Don Francisco Dana Rodríguez será la que le dé el impulso definitivo a la construcción de la Casa de Hermandad.
En primer lugar se legalizará el proyecto de las obras, seguido de un estudio económico para la viabilidad de las mismas, concluyéndose con la adjudicación de las obras a una empresa constructora de nuestra localidad: Hermanos Piñero.
El quince de junio de mil novecientos noventa y dos comienza definitivamente el sueño de las obras, realizándose paralelamente un sin fin de actividades (Rifa Pro-Casa Hermandad, Teatros… hasta la proyección de una película que sería el inicio de una actividad que nos lleva hasta nuestros días: el Cine en el Teatro Cerezo) con las que obtener los ingresos que harían frente a los muchos pagos que en poco tiempo se habían de hacer.
Todos, miembros de la Junta de Gobierno, hermanos, allegados, vecinos… pusieron su granito de arena para que en seis meses, lo que en un principio en fines de semana pretendíamos hacer, fuese una realidad maravillosa a trece de diciembre de ese mismo año.
La pintura corrió generosa y desinteresadamente de las manos de nuestros hermanos Rafael Domínguez Valencia y Francisco Arpa Alonso. Los trabajos de herrería y carpintería de nuestros hermanos Ángel Dana Rodríguez y Manuel Villalba Rodríguez respectivamente y la instalación eléctrica por cuenta de nuestro hermano Juan Ant. Rodríguez Barrios… A quienes se sumaron muchas manos ilusionadas que dotaron a la casa de mobiliario, colgaron cuadros, apliques y lámparas… y pusieron pequeños detalles para que fuese acogedora y estuviese de “punta en blanco” para el día de su inauguración por el Sr. Vicario Arciprestral de Zona y Director Espiritual de la Hermandad, Don José Antonio Gómez Coronilla.
Las obras cambiaron estructuralmente el aspecto de todo el edificio, conservándose fielmente y como testigo de aquel añorado Colegios Salesianos, la fachada principal y el zaguán.

DISTRIBUCIÓN

A la planta baja se accede mediante portalón y zaguán a patio que distribuye a las distintas dependencias, al fondo del patio queda una galería de descanso cuya fachada a patio se resuelve mediante tres arcos de medio punto.
Entrando a la izquierda, un almacén para los pasos, y entre el almacén y la galería, un cuerpo dedicado a la exposición de enseres de la Hermandad. De aquí parte una escalera de ida y vuelta para subir a la planta alta donde se distribuye la sala de junta, un salón para actividades y la secretaría-mayordomía.

SALA DE ENSERES

Nuestros enseres constituyen un rico patrimonio material para nuestra Corporación, del que destaca sobre manera el espléndido manto de salida de la Santísima Virgen de la Paciencia, el cual luce para que pueda ser contemplado durante todo el año en la sala de enseres, creada para albergar en su interior, todas las piezas que componen nuestro magnífico paso de palio (bambalinas, respiraderos, varales, techo de palio, faroles de cola), junto a algunas insignias (simpecado, SPQR, guión corporativo, guiones de Santiago, María Auxiliadora y CCCL Aniversario).
Del mismo modo se exponen de forma permanente, las distintas sayas bordadas que posee nuestra dolorosa, así como las potencias y los cordones que conforman los atributos de la Imagen de Nuestro Padre Jesús en la Columna.

Sala de enseres
Sala de enseres
Sala de enseres
Sala de enseres
Sala de juntas
Sala de juntas
Salón multiusos
Salón multiusos